Nosotros como devotos o aspirante a una vida vaisnava muchas veces llegamos a hablar de la tradición. Eso puede ser con la intención de invocar respeto y compromiso en nosotros (en uno mismo y otros devotos) con las enseñanzas y ejemplos dejados por nuestros maestros anteriores o puede ser también para dar cierto peso o darle mas credibilidad a lo que estamos haciendo y exponiendo ante alguien. Por ejemplo, presentar un pensamiento o práctica como parte de una tradición milenaria por lo general da mas credibilidad a ello, comparado con nuevas o desconocidas idea dadas por individuos mas o menos insignificantes. Mucha gente tiene cierto aprecio y respeto por lo que es antiguo y comprobado.

De todos modos, la tradición tiene para nosotros cierta importancia en nivel práctico y nivel argumentativo, pero en ambos casos hay que entender muy bien que es la tradición y que implicaciones vienen con ella. Una tradición mal entendida es una construcción vacila, hecha de formas y maneras de ser superficiales. Sin que se sepa el verdadero ideal y propósito, y en caso negativo, las limitaciones de una tradición mal entendida, mal representada o desajustada del tiempo, lugar y circunstancias, no puede haber verdadero beneficio, ni para el individuo ni para la comunidad. Ademas, la tradición o interpretaciones de ella en las manos de personas malintencionadas se puede volver instrumento de manipulación, afectando la libertad y voluntad de miembros integrantes, tal como dañando la fama y beneficios de la tradición como tal.

En términos generales podríamos decir que la tradición es un sistema normativo de ciertos valores y reglas que son aprendidos, vividos y enseñados a travez de varias generaciones. Estar dentro de la tradición puede dar a uno cierta identidad, seguridad y beneficio, pero al mismo tiempo exige a uno ciertos compromisos con los valores establecidos y estandartes de comportamiento. Una tradición o su impacto en la vida del individuo se puede considerar fuerte, cuando la mayoría de sus integrantes en gran parte y voluntariamente cumple con las normativas y valores comunes del grupo. Caso contrario, cuando sus miembros empiezan comportarse fuera de las normas de la tradición, esta se empieza a deshacer y perder su importancia.

Todo cambia influenciado por el tiempo

Los grupos o células sociales, desde la mas pequeña, la familia, hasta las mas grandes como diversos grupos de interés común, sindicatos, empresas, naciones y hasta religiones, pueden tener su propia tradición, que a la vez puede ser parte integrada o derivada de una tradición mas antigua o mas abarcadora. Una célula social y en relación con ella su tradición, aparece en un momento, crece y se mantiene por cierto tiempo y después puede ser que se ramifique, desfigure, desintegra y hasta desaparece.

Todo el universo es subyugado por el factor tiempo, que no es diferente de Krishna mismo (kālo ‘smi lokakṣayakṛt pravṛddho) y es sujeto a un continuo cambio, sucediendo entre la creación y la destrucción (universo), la fundación y la desintegración (ideología e institución) y el nacimiento y la muerte (cuerpo).

En ese sentido, la tradición contiene sabiduría (intuición), mecanismo (reglas) y manera (regulaciones) de realizar metas, basadas en un dado paradigma o en enseñanzas fundamentales, como el sambandha-jñāna de nuestra tradición, y eso dentro de un cierto tiempo, lugar y circunstancias.

Las reglas y regulaciones por si son pasivas y requieren un ajuste al tiempo, lugar y circunstancia (incluyendo la persona que las ejecuta). El criterio de hacer estos ajustes proviene únicamente del deseo del Señor, que se manifiesta travez de la sabiduría e intuición de un vaisnava, conectado con servicio al Supremo y con la esencia de las escrituras.

Tradición en el kali-yuga

Las reglas y regulaciones vaisnavas y todo lo que se refiere a la adoración ritualistica, no son ordinarios, en el sentido, que son conectados con la meta absoluta de la vida y no son inventados por seres ordinarios. Ellas son establecidos por las grandes autoridades en el servicio devocional, como Narada Muni, y son preservadas y traspasadas travez de la linea discipular conocida como el pancaratrik-sampradaya.

Ellas son funcionales y validas dentro de una sociedad formada en base de estos mismos principios, pero bajo la influencia del tiempo y en especial del kali-yuga el mundo se esta convirtiendo mas y mas en un lugar de circunstancia desfavorables para la ejecución del servicio devocional regulado y la sociedad es reducida a algunos pequeños grupos de ortodoxos seguidores de estos principios, quienes terminan excluyendo a otros del servicio al Señor basado en la casta, rasa, género e otras distinciones externas.

Por esta razón, para mantener la importancia y los beneficios de los viddhis (o reglas y regulaciones vaisnavas), pero adaptándolas a todas las posibles circunstancias, como por ejemplo al mundo moderno occidental o cualquier otra sociedad, Sri Caitanya Mahaprabhu trajo el yuga-dhama, el nama-sankirtana.

kali-kālera dharma—kṛṣṇa-nāma-saṅkīrtana
kṛṣṇa-śakti vinā nahe tāra pravartana

„El canto del santo nombre de Kṛṣṇa es el sistema religioso fundamental en la era de Kali. Sin haber sido dotado de poder por Kṛṣṇa, no es posible propagar el movimiento de saṅkīrtana.“


Rompiendo con la tradición

Cargar la esencia del servicio devocional y expandiendola propagando las glorias del nama-sankirtana no puede hacerlo cualquier. Uno tiene que ser empoderado por Krishna mismo. La tradición como tal se puede volver incluso un obstáculo a un predicador tan empoderado. El deseo de expander las glorias del canto del Santo Nombre están por encima de cualquier otra consideración para el. Srila Sridhara Maharaja llamó esta actitud, que fue manifestada por su maestro espiritual, Srila Bhaktisiddhanta Sarasvati Thakura Prabhupada, vaikuntha-vrtti.

Haciendo planes para predicar en Londres, Srila Sarasvati Thakura hizo un comentario que esta dispuesto servir carne en un hospedaje, solo para atraer las personas mas a escuchar las glorias de Mahaprabhu. Muchos, entre ellos Srila Sridhara Maharaja, no podrían digerir una declaración tan grave y en contra de principios vaisnavas. Por eso Sridhara Maharaja preguntó a su guru sobre esta idea, que le aclare la duda, a lo que Srila Prabhupada Bhaktisiddhanta respondió: „Yo vengo desde hace vidas pensando como distribuir este mensaje de Mahaprabhu. No puedo frenarme frente consideraciones triviales.“ Sridhara Maharaja declaró esa actitud como vaikuntha-vrtti, rompiendo todos los limites y reglas para dar el mundo ilimitado.

Srila Prabhupada, nuestro maestro espiritual y muchos otros predicadores han mostrado esa misma actitud, de subyugar todas otras consideraciones a la necesidad de expander la conciencia de Krishna. Eso es un síntoma del empoderamiento, aunque en los ojos de los ortodoxos pareciera ser ignorancia y/o desrepeto a la tradición. Todos los predicadores han sido criticado por su atrevimiento de predica. Es justo de lo que nos advierte la escritura, al llamarnos la atención a la gravedad del sadhu-ninda, a la critica de aquellos quienes han dedicado su vida a la propagación de las glorias del Santo Nombre.

Corriente libre de la predica

Aunque no puede ser una regla general, porque hay devotos muy introvertidos y con otros servicio dentro del plan divino de Caitanya Mahaprabhu, Srila Jiva Gosvami estableció que la grandeza de un vaisnava se mide con la grandeza de su predica. (tat evam kalau nama sankirtana pracarine)

En ese sentido, limitar la tradición a la forma, a una construcción de reglas y regulaciones, o ciertas formalidades es una ofensa al abidheya, o el aspecto dinámico de la tradición vaisnava. Sri Caitanya Mahaprabhu fue el primero quien rompió con muchas restricciones tradicionales al predicar y dar la misericordia a todos, sin considerar su nacimiento y estrato social. Unos siglos después, Srila Bhaktivinoda Thakura y Srila Sarasvati Thakura han liberado la corriente del movimiento de Mahaprabhu del monopolio de diferentes grupos tradicionales, quienes se pensaban únicos dueños de la misericordia de Sri Caitanyadeva. Al mismo tiempo han abierto la puerta para que esa corriente se salga de la forma bengali y entra y se expande travez de muchas otras formas y manifestaciones.

Todo eso puede crear mucha confusión en las mentes de personas no aptas en percibir y/o aceptar la voluntad de la corriente del servicio devocional y del plan divino. Asi que puede haber devotos occidentales, quienes no entienden ni 10 palabras de bengali, criticando otros devotos por cantar canciones vaisnavas en español (e incendiando lo que cantan). Ellos dicen que no es la tradición. Puede haber otros quienes critican el color del dhoti, por no ser tradicional, sin saber, de que Srila Bhaktisiddhanta, para distinguir sus brahmacaris de los renunciantes ordinarios, había intentado establecer dhotis negros y verdes, antes de regresar al azafrán, el color „tradicional“. Las consideraciones sobre las ofensas en contra de la tradición pueden ser muy variadas, algunas bobadas y cosas chistosas, hasta cosas mas serias como el proceso de la adoración de la deidad y el proceso de la iniciación, por ejemplo quien iniciar, cuando y donde, en presencia o después de la partida del maestro espiritual y mucho mas.

Nuestra tradición es vaikuntha-vrtti, la consideración de la expansion de la conciencia de Krishna por encima de todo el resto. Eso no es fácil de cargar y apreciar, por eso tiene que haber espacio para ajustes individuales, conceptos y exigencias con las que uno puede encontrar su manera de practicar. Srila Sridhara Maharaja decía, Gurus ordinarios se hubieran caido, si hubieran distribuido el Santo Nombre a tantas personas carentes de fe, como lo ha hecho Srila Prabhupada.


La tradición apoya, no juzga

Nosotros, siguiendo a los grandes, tenemos que ubicarnos bien. Lo peor que nos puede pasar es limitar a los que han dejado todos los limites a un lado. Eso significa limitar, pensar que el guru y los grandes vaisnavas, son así, como nosotros los percibimos. Otro error en seguida es criticar a los hermanos espirituales quienes aprecian y tratan de servir el guru de acuerdo con sus realizaciones.

Entre los hermanos espirituales muy rápido se designan como traicioneros del guru, alejados de la tradición, ensimismados etc. sin entender bien la amplitud de la palabra guru, el significado real de la palabra tradición y también de la necesidad de la introspección y el ajuste personal a las exigencias del camino espiritual.

Srila Bhaktivinoda Thakura explica que hay dos actividades esenciales para un Vaisnava:

1.) tratar de entender quien es un sadhu, analizando bien las 26 cualidades de un vaisnava y aceptando, que la cualidad de haber tomado refugio exclusivamente en Krishna resalta nutre a todas las demás. Y

2.) asat-sanga-tyaga, ei vaisnava acara – evitar la mala asociación, las que Thakura Bhaktivinoda explica en el
Sri Bhaktyaloka.

Desenfoque de estas dos practicas esenciales terminan inevitablemente en sadhu-ninda (ofensas contra los sadhus) y generan asi las circunstancias menos deseadas para el progreso en este camino.

Quien se cuida bien de la ofensas y sigue estas practicas con gran atención, siempre tendrá buena asociación. A el se le revelara de manera natural todo relacionado con la tradición y el sabra escoger bien el camino y así sera exitoso en el sendero de la devoción.

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