Cuando se habla de un sevaka neófito, éste es aquel que es incapaz de prestar servicio apropiadamente, incluso aún siendo directamente guiado por Śrīla Gurudeva. Dentro esta categoría, existen a su vez seis tipos de sevakas totalmente ineficaces, a quienes se hace referencia como sevakādhamā, que significa “lo más bajo de los sevakas”:

alir bāṇo jyotiṣaka stabdhībhūtaḥ kimekakaḥ
preṣita-preṣakaś caiva ṣaḍ ete sevakādhamāḥ

“Hay seis tipos de sevakas insatisfactorios, a saber: los que son inestables e inconstantes como las abejas; los que responden insolentemente, perforando así los oídos del maestro como una flecha; los que demoran y postergan; los vagos e inactivos; los que se rehúsan a hacer algo por sí solos; y los que delegan para evitar las responsabilidades.”

  1. En relación al primer caso (el sevaka que es inestable e inconstante como las abejas) se nos dice que la abeja (ali) esta únicamente interesada en tratar de extraer el polen para su propia conveniencia: Así, al recibir la orden de Śrīla Gurudeva este tipo de falso siervo será renuente a obedecerla, si dicha instrucción no le agrada. Más bien, se tomará una cantidad de tiempo inusual “zumbando” alrededor de dicha orden. En otras palabras, se refiere aquí a alguien que no es leal, exhibiendo esto a través de su inconstancia, así como a aquellas personas que siempre son desagradecidas e insatisfechas y que terminan así abandonando a su guru tan pronto como han extraído de él lo que deseaban (en la misma forma en que una abeja extrae el polen de una flor y al vaciarla la abandona, en busca de otras flores).
  2. El segundo tipo de sevakādhamā (los que responden insolentemente, perforando así los oídos del maestro como una flecha) es aquel que responde de forma arrogante, atravesando a su maestro como con una afilada flecha (bāṇa): Este tipo de supuesto sevaka es alguien desobediente quien continuamente contesta mal a su Gurudeva (hasta el punto de encontrar fallas en él), y así sus filosas palabras son como flechas que atraviesan y hieren el corazón de Sri Guru. Otro significado a este mismo tipo de pseudo-sirviente, se aplica a cuando Śrīla Gurudeva da una orden y este sevaka no calificado no esperará a oírla completa o cuidadosamente, sino que “volará” a través de la puerta (tal como una flecha) para llevarla a cabo, pero sin saber a dónde ir, qué hacer o cómo hacer lo que corresponda.
  3. La tercer clase de sevaka neófito (el que demora y posterga) es indicado aquí con la palabra sánscrita jyotiṣaka. “Jyotiṣa” significa astrología y así en relación a esto, este tipo de sevaka no calificado inventará muchos problemas y eventualidades, los cuales lo abrumarán y le impedirán cumplir la orden de su Gurudeva: Tal supuesto sevaka no entiende el poder presente dentro de la instrucción de un guru genuino y en lugar de esto, calcula como un astrólogo, esperando por el correcto alineamiento de los planetas o las circunstancias antes de considerar hacer algo.
  4. El cuarto tipo de sevakādhamā es el vago e inactivo (stabdhībhūta). La palabra sánscrita stabdhībhūta significa “sin habla”, “inerte”, “perezoso” o “inmóvil”: De esta forma, cuando Śrīla Gurudeva da una orden, este supuesto sevaka queda aturdido, confundido y, por ende, es incapaz de tomar acción alguna. Superado por la confusión o la vagancia, no hace nada en absoluto.
  5. La quinta especie perteneciente a estos pseudo-siervos, es aquel que carece de iniciativa propia, rehusándose a hacer algo por su propia cuenta (kimekakaḥ). Al recibir una orden de Śrīla Gurudeva, este sevaka ineficaz piensa: “¿Cómo podría hacer esto yo solo? ¡Hay tantos otros aquí a mi lado! ¿Por qué Gurudeva no le ordenó esto a alguien más? ¿Por qué justo a mí?”
  6. Finalmente, el sexto y último tipo de kaniṣṭha-sevaka es aquel que delega para evadir responsabilidades (preṣita-preṣaka). Cuando Śrīla Gurudeva da a este imitador de sevaka una tarea, este último enseguida busca a alguien a quien pasársela, de manera de poder deshacerse convenientemente de toda responsabilidad: Así, tal orden termina siendo pasada de una persona a otra, y finalmente nunca es cumplida. Para tal persona, la orden del guru es un inconveniente y no una bendición. Luego, cuando Śrīla Gurudeva pregunte sobre dicha instrucción, el sevaka le informará que ha pasado tal orden a alguien más.

Estos diversos casos ilustran claramente los diversos defectos que pueden surgir en el contexto de dasya-bhava, pues más allá del tipo de relación específica que cada sevaka eventualmente descubra por la gracia de Sri Guru y de una seria y madura ocupación en sadhana, el eje central que existirá como trasfondo a cualquier tipo de vínculo en la trascendencia es justamente dasya, o servidumbre: Y este tipo de humor fundamental que será el sostén cualquier otro rasa genuino, puede y debe ser apropiadamente cultivado ante todo, en relación a Sri Guru.

Comparte a...