Pregunta:
Podría por favor ampliar el concepto de castidad para las personas que no pueden vivir en un templo?
Respuesta:
Krishna es el único objeto de adoración para el devoto y de todas sus consideraciones el centro. Las circunstancias externas de un devoto pueden ser diferentes dependiendo si éste vive en un templo o no, pero para un devoto serio, y de corazón, Krishna siempre será eje en sus motivaciones.
Bhakti es independiente de karma y jnana. Por lo general en la medida que se tenga apego por karma y vairagya se definirá si se es brahmacari o grhasta. Sin embargo en el caso de un devoto puro, por ejemplo, no estando apegado karma y/o jnana, igual va tomar una posición en uno de estos dos aśramas y va actuar como tal en apariencia.
De esta manera podríamos decir, que la castidad para un devoto significa smartavyaḥ satataṁ viṣṇur vismartavyo na jātucit, siempre acordarse del Señor y nunca olvidarse de él.
Acordándose del Señor, naturalmente se va evocar al maestro espiritual y sus enseñanzas, o mejor dicho, recordando al maestro y sus enseñanzas uno podrá evocar al Señor.
De esa manera la castidad se puede ver en la determinación para seguir el ideal y la actitud en el desempeño del servicio, la cual nos ha sido dada y mostrada por nuestro maestro espiritual. Ese ideal y esa actitud van más allá de: la forma externa, la cantidad, o cualquier otra característica superficial con que puedan ser descritas. De esa manera cada uno tiene que seguir su camino interno y ahí descubrirá el significado de la castidad.
Por esa razón debemos ser muy cautelosos de no juzgar superficialmente a otros devotos, considerándolos castos o incastos, porque la castidad es algo muy sutil y profundo. A veces hay un poco de desavenencias entre los devotos “internos“ y “externos“, porque cada uno desde su posición trata de proyectar su criterio respecto a la castidad. Por ejemplo devotos que viven dentro del templo pueden imaginar que los devotos “externos” están en maya, y los devotos que viven fuera del templo pueden imaginar que los “internos” son orgullosos, elitistas o con otras fallas.
En relación a la convivencia entre vaisnvas, el único criterio verdadero a seguir consiste en profesar respeto para todos y aún más, respeto para aquellos devotos que revelan un grado más grande de dedicación y apego al Santo Nombre.